Seguimos con la sección de nuestras grandes Leyendas, esta vez de la mano de Daniela que nos cuenta a uno de los grandes, el gran Gallego.
Muchísimas gracias Dani, y disfrutar de la entrada que merece mucho la pena...
Ricardo Gallego Redondo, el “Soso”
Gallego: toda una vida unida al Real Madrid.
Empezamos nueva sección, esta vez dirigida
a mitos y figuras de nuestro querido Real
Madrid. Y como siempre el primero hace la novatada y allí voy yo. Me han
encargado que os cuente algunas hazañas del
“Soso” Gallego y eso
intentaré hacer a continuación.
Como dijo Jack el Destripador: vamos por partes. Pero empecemos por el
principio porque si empezamos por el final, primero meteremos la mano en la licuadora y luego
veremos si está encendida.
Pero
primero un pequeño apunte de la mano de un gran amigo acerca de su apodo:
El “soso”
apodado así por el difunto Héctor del
Mar (ya que estamos, os hago un breve resumen de “El hombre del gol”, fue un comentarista argentino de fútbol y de
la WWE en España junto con Fernando
Costilla. Su carrera en España comenzó en los años 80 en la Cadena Ser y
continuó en Radio Intercontinental, donde se atragantó cantando los 12 goles a Malta.
Posteriormente pasó a Radio España y Radio Libertad. Fue el primer narrador
de lucha libre en España, trabajo que compaginó con otras apariciones en
programas. Y como he dicho breve, ya me callo.)
Muy bien y ahora empezamos a contar la
trayectoria del líbero o medio centro. Una trayectoria mayoritariamente blanca.
Ricardo nació el 8 de febrero de 1959 en Madrid. Con tan solo tres años
ya pisaba el Bernabéu de la mano de su padre, un gran aficionado al fútbol y al
equipo de sus amores, el Real Madrid.
Él se oficializó como socio en 1965 con la
total convicción de que su color era el blanco. Un poco después y como jugador
ya del Real Madrid tuvo que dejar de ser socio ya que las normas no permitían a
sus trabajadores serlo.
Pero no le resultó fácil su entrada en el
club blanco. A principios del 1973,
Gallego fue junto con su primo a rellenar una ficha para las posteriores
pruebas pertinentes. Su espera fue algo larga, concretamente medio año, sin
embargo, la espera mereció la pena. Puede presumir de haber pasado por todas
las categorías inferiores del Real Madrid hasta su llegada al primer equipo.
Todo esto sin pasar desapercibido y consiguiendo títulos en cada una de las
categorías.
Gallego siempre jugó en categorías
superiores y con compañeros que le superaban en edad. Así jugó tres años con el
Infantil A, equipo con el que se proclamó campeón de España en su primera
temporada, tras enfrentarse en la final con nuestro querido (jaja!) eterno
rival: el F.C. Barcelona.
Posteriormente, en la temporada 77-80,
asciende al Castilla, aquí empieza su ascensión hacia lo más alto. Su
contribución al equipo se puede calificar como importante y decisiva…hasta el
punto de llegar a disputar una final de la copa del Rey.
La gesta
de la Copa del Rey en 1980 es, sin
duda alguna, un motivo de recordatorio, algo que no es
comparable con ningún
hecho en la historia del fútbol español. Los “peques” de la casa fueron
venciendo uno a uno a equipos de la talla del Sporting de Gijón o el Athletic
de Bilbao. El Castilla venció en San Mamés por un gol a dos concluyendo así las
semifinales pasando éstas a formar parte de la leyenda blanca.
La final
de la Copa del Rey se disputó entre el Real Madrid y su equipo filial el
Castilla. No obstante, el primer equipo ganó 6 a 1.
Aún así, todo quedó en casa. Los jóvenes
talentos pasaron a la historia consiguiendo
un gran triunfo llegando a la final y los mayores concluyeron la gesta
proclamándose campeones de modo que, visto de esta forma, hubo un final feliz
para ambas partes.
Posteriormente y, tras este paso hacia la
gloria, Gallego pasó al primer equipo,
donde jugó 9 temporadas (en las temporadas 1980-1989). Durante su paso por el
primer equipo consiguió: 4 ligas, 2 Copas de la UEFA, 2 Copas del Rey y una
Copa de la Liga.
Comienza jugando de libre y alterna este
puesto con el medio centro. Jugando con soltura en ambas posiciones y dándolo
siempre todo en cada partido y haciendo honor al escudo de su camiseta.
Cabe destacar que no tuvo un inicio del
todo bueno en el primer equipo, en un partido contra el Betis sufrió un rotura
de tendón que le obligó a pasar por quirófano y a olvidarse de jugar más
durante esa primera temporada. Perdiéndose la final de la Copa de Europa ante
el Liverpool, disputada en París en 1981.
En su segunda temporada empezó de cero con
las mismas ganas de hacerlo lo mejor posible en cada partido. Su ímpetu se
materializó en obtener un puesto fijo y ese mismo año fue convocado por la
Selección Española. Desde entonces se convirtió en un titular indiscutible
hasta su retirada.
Debutó con la Selección Española en Valencia el 24 de febrero
de 1982 contra Escocia.
Sin embargo, los títulos con el club
blanco se hacían de rogar. No corrían buenos tiempos para los nuestros. La liga
cayó en el último momento, a pesar de que no fue una mala temporada dado que se
disputaron cuatro finales (Copa, Supercopa, Recopa y Copa de Liga) y, se peleó
por la Liga hasta agotar posibilidades, todas esas finales se perdieron.
Tras esta temporada desastrosa, Di Stéfano
abandona las filas del club blanco y,
entra Amancio al banquillo. Empieza una nueva época llena de títulos y momentos
memorables para nuestro club. El primer título en caer fue la Copa de la UEFA y
empezaron a sonar las famosas remontadas
europeas, propias solo de este gran
club. Por aquella época contábamos con unas cuantas estrellas y mitos del Real
Madrid
como: Gordillo, Buyo, Hugo Sánchez, Camacho, Juanito, Santilla y el
propio Gallego.
A partir de este momento todo fue viento
en popa, se ganó el cariño de su afición, aclamándolo en cada uno de sus
partidos. Pronto empezaron a volver a llegar los títulos a la casa blanca
consiguiendo: 4 ligas, 2 Copas de España y 1 Copa de Liga.
Además, cabe destacar que fue elegido
durante 6 años para defender los colores de la Selección Española, contando así
con dos Mundiales y dos Europeos. En su paso por la Roja
consiguió que se le nombrara el “mejor líbero” de la Eurocopa de las Naciones
en Francia durante el 1984. También formó parte del once inicial en el Mundial
de México de 1986. A lo largo de su carrera sumó 42 partidos internacionales.
Tras ocho temporadas en el primer equipo y
tras todo una vida vistiendo de blanco Gallego decide salir del club en 1989,
saliendo por la puerta grande pero, con el dolor de dejar al equipo de sus
amores y sintiendo el dolor de su afición.
En posteriores declaraciones confesó: “No
quería que nadie pudiera decir que me habían regalado algo o que le habían
echado del club de sus amores, ni que estaba por compasión. Por otra parte, acababa
de recoger la Copa del Rey de manos de su Majestad, que habíamos ganado ante el
Valladolid en el Calderón”.
Tras su salida del Real Madrid se fue una
época a Italia, donde jugó una temporada con el Udinese. Al año siguiente
decidió regresar a España y terminar su carrera futbolística en el Rayo
Vallecano. Tras la primera temporada, José Antonio Camacho, con el que había coincidido
como jugador en el Real Madrid, tomó las riendas del Rayo y éste subió a primer
división.
Fue aquí cuando y dónde el “Soso” decide abandonar por completo su carrera como futbolista.
Años más tardé regresó al Real Madrid como
adjunto a la dirección de la cantera, cargo que ejerció hasta la llegada de
Tito Floren a la presidencia del Real Madrid.
Y ¿dónde está? Pues actualmente es
ayudante del seleccionador chino de fútbol José Antonio Camacho.
Y esto es todo amigos. Un placer escribir
para vosotros familia. Nos vemos pronto. Sed felices y siempre, siempre,
empezar por el principio que si empezáis por el final primero llevaremos a cabo
el coito y luego nos pondremos el condón.
Dayane
para la BBC.